En el desierto
vi una criatura, desnuda, bestial,
que, acuclillada en el suelo,
sostenía su corazón en las manos,
y comía de él.
Dije, «¿Está bueno, amigo?».
«Está amargo», me respondió,
«pero me gusta
porque está amargo
y porque es mi corazón».
Stephen Crane
Daniel Henares 
A mí me sorprende este poema de Crane y no lo comprendo bien, aunque supongo que tendrá más de una interpretación.
¿Cómo estás, Daniel? Te deseo una Feliz Navidad y muchas cosas buenas para el año nuevo ya tan cerca. Un fuerte abrazo
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Sí, yo creo que puede tener muchas interpretaciones y eso le suma valor en mi opinión. Yo lo veo como una especie de visión en la cual el instinto depredador y destructor del hombre ha acabado con todo (de ahí el desierto). Y somos testigos de la locura del último hombre, ya convertido en poco más que una bestia, que se devora a sí mismo y, lo que es peor, lo disfruta. Es mi forma de verlo. Sea como sea, hay que admitir que la imagen es escalofriante.
Gracias, Úrsula. Yo te deseo lo mejor también ^^. Estoy bien, sigo en mi encrucijada vital eterna, pero ya casi que lo voy asumiendo. Quizá algún día encuentre mi camino, de momento sigo dando bandazos por la vida, o eso creo. Porque es posible que esté yendo hacia algún sitio sin notarlo, quién sabe, la vida es tan extraña. Pero bueno, el tiempo lo dirá.
Bueno, espero que vaya bien la cosa y siga mejor, Úrsula. Un abrazo muy fuerte y felices fiestas ^^
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Muchas gracias, Daniel!
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